Autobús, autocar; minibús, mini van ¿Qué necesito realmente?

Miércoles, Enero 08, 2014

En España no existe un nombre homologado para cada tipo de bus, y muchas veces podemos confundir el tipo de transporte que necesitamos para nuestro grupo sin realmente saberlo. Otras veces podemos llegar al punto de partida y encontrarnos con la desagradable sorpresa de encontrar un automóvil que nada tiene que ver con lo que buscábamos en un principio.

Es por ello que nos parece importante que se definan denominaciones correctas y estándard para la industria, de esta manera, dejarían de existir tantos malos entendidos por parte de las agencias de viajes y las empresas de alquiler de autobuses (o autocares, o microbuses, o minibuses, etc.).

Como hay que empezar por algún lugar, pasaremos a mencionar y describir cada uno de los tipos de vehículos que se pueden encontrar en nuestra web y su denominación correcta.

Autobús, Autocar

Los autocares (también llamados autobuses) consisten en un vehiculo de entre 12 y 14 metros de largo, con capacidad para 55 hasta 65 pasajeros. También los hay de doble piso, aunque son menos comunes y definitavemente menos cómodos. Los autocares se dividen en varios tipos, que mencionaremos a continuación:

Autocares Ejecutivos:

Son superiores en comodidad ya que tienen más espacio para estirar las piernas. La desventaja de este tipo de vehículos es que tiene una menor capacidad, y por lo general tienen unos 42 asientos o menos.

Autocares VIP:

Como su nombre lo indica se trata de de autobuses que tienen un nivel superior de lujo. Tienen mucho menos espacio y no suelen pasar de 30 asientos. La ventaja es que dispone de asientos reclinables (parecios a los de los aviones) y mucho espacio para que los usuarios puedan estirar las piernas. Algunas veces pueden tener azafatas sirviendo bebidas y algún snack. El chófer suele hablar por lo menos una lengua adicional, generalmente inglés.

Hay otro tipo de autocares como los autocares adaptados, que son vehiculos con acceso para personas de movilidad reducida; los autocares descapotables tienen un techo abierto para ciudades muy calurosas, no confundir con los autobuses panorámicos que tienen techos corredizos y audioguías incluidas.

Minibus, midibus, microbus

Hay otra catregoría muy solicitada, se trata de los autobuses en pequeña escala, llamados por lo general “minibuses”. Otro término que se presta a confusión y que comparte la categoría con el midibús y el microbús. Pasemos a entender la diferencia entre uno y otro:

Minibús:

es el autobús más pequeño de la familia de transportes para grupos. El número de asientos va de 9 pasajeros y llega en los casos de mayor espacio a 16. Por lo general este tipo de autobuses se usan para guías turisticas en una ciudad, especialmente útil en aquellos lugares con calles angostas.

Microbús:

se trata de un transporte realmente pequeño, aunque el nombre de “bus” no se lo ha ganado precisamente por su capacidad. Muchos insisten en llamarle un “coche” de gran capacidad. Lo cierto es que el microbús puede tener una capacidad hasta 9 personas, incluyendo al conductor. Se utiliza mucho como transfers de areopuerto y hacia hoteles u otros destinos cercanos a aeropuertos.

Midibús:

es un vehículo que, como su nombre hace el esfuerzo, intenta indicar que está entre un minibus y un autobus estándard. Puede llevar hasta 35 personas y suele medir no más de 12 metros. No tiene lavabos, por lo que no es recomendado para viajes extensos sin paradas.

Es cierto que existen un sinfín de vehiculos para viajes largos, medianos y cortos, y con la diversificación del turismo cada día hay más autobuses diferentes. En este caso no los mencionamos pero podremos abarcarlos en otra ocasión (desde buses festivos a buses anfibios -que esperamos cubrir en nuestras próximas entradas al blog-).

Con la explicación de los “mini, micro y midi” damos por terminada esta primera entrega y esperamos que sirva como reflexión para que la  industria discuta la homologación de los tipos de vehículos para poder ser más específicos y evitar los diferentes contratiempos y problemas a los que nos vemos sometidos por una industria sin nomenclaturas claras.